Grecia y la "nueva política"

Fuente: El Mundo

   En Grecia las esperanzas de la ciudadanía de una democracia que no esté al servicio de los bancos han chocado con su tercer rescate. Es verdad, por ahora Syriza (o su primo hermano español: Podemos), los partidos que se consideran símbolo de la nueva forma de hacer política, no son corruptos, no ha habido tiempo, y démosles la sombra de la duda de que no van a ser como “el resto”, pero la ilusión que habían generado la han roto y convertido en fraude, mentiras y mucha desilusión. Nada distinto a los sentimientos que generan votar a los “partidos tradicionales”.

   En Grecia la “nueva política” la representaba Syriza, pero tras la traición que supone a su electorado y al país, por firmar un rescate de condiciones más leoninas que el rechazado por Referéndum convocado por Tsipras, ocasionó un adelanto electoral para lavar los trapos sucios y escisiones de la oposición interna que tenía Tsipras en su propio partido y para que le avalen con el voto del pueblo un rescate ya firmado ante de las elecciones. Pero el pueblo que votó, el 57%, el resto (43%) se abstuvo, dijo sí a la gestión de syriza y Tsipras del rescate a los bancos, el tercero ya. Volverá a gobernar Syriza con la extrema derecha nacionalista de Griegos Independientes, (ANEL) por otro lado los mafiosos neonazis de Aurora Dorada se asientan y la escisión de Syriza (Unidad Popular) no consigue representación.

   Ha sido una elección triste de de gestión de la resignación y de domesticación de un electorado y unos ciudadanos hartos de tantos recortes sociales y tanto auster  icidio económico, que eligen de lo malo lo menos peor. Menudo panorama. De esta humillación y traición al pueblo griego no puede salir nada bueno.

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